El enganche de Boca, Juan Román Riquelme, protagonizó en SportsCenter (ESPN+) un emotivo diálogo. Se refirió al récord que alcanzó en el partido del domingo como el jugador con más partidos disputados en La Bombonera: “Disfruto al máximo jugar en La Bombonera, espero jugar muchos partidos más. Yo de chiquito soñaba jugar un partido ahí. Tuve suerte, desde el primer partido que jugué, frente a Unión, la gente me ovacionó. Sin ellos no me pasaría esto. Jugar al fútbol es lo que amo, nunca voy a poder devolver todo lo que los hinchas me dieron. A la pelota la voy a besar hasta el último partido que juegue”, y añadió: “Sé que cuando entre a La Bombonera la gente va a cantar por mí. Cuando no lo hagan, me sentiré raro. Es raro porque ya estoy bastante grande, he vivido cosas increíbles en el club, pero los hinchas me siguen sorprendiendo. El otro día vino un hincha al entrenamiento, me pidió permiso y se sacó la remera. Tenía los brazos tatuados con mi cara, yo no lo podía creer”.
También se mostró confiado con el superclásico que se avecina: “El superclásico que vamos a jugar va a ser distinto a todos los demás partidos. Acá si uno de River choca con uno de Boca y lo tira contra los carteles, la hinchada lo va a ovacionar. En un superclásico ovacionan todo. Llegamos bien al superclásico, con el marco ideal. Tenemos que confiar en lo que tenemos y veremos si conseguimos los 3 puntos que necesitamos. Tendremos que jugar los noventa minutos bien para que el hincha de Boca que lo esté viendo por la tele lo disfrute”. Aunque agregó, refiriéndose a la ausencia de visitantes en el estadio Monumental: “Nos vamos a encontrar con un equipo con muchas ganas, y la hinchada los va a apurar para que sean protagonistas. Tener toda la gente del estadio de tu lado te puede jugar a favor o en contra, hay que ver cómo se dan las cosas”. Refiriéndose a esto, tiró: “Se va a extrañar mucho la gente saltando y alentando. Sabemos que jugamos en el equipo que tiene más hinchas en el país, en el más grande de Argentina, pero sin dudas sin la hinchada no es lo mismo”.
Además opinó sobre las lesiones que atormentan a Boca, a las que se le sumó Ribair Rodríguez: “Tenemos otro lesionado más y no podemos mantener tres o cuatro partidos el mismo equipo”, pero se mostró confiado con contar con la presencia de el ‘Cata’ Díaz en el superclásico: “El ‘Cata’ tiene ganas de marcar a Teo en el super. Creo que va a estar bien, su familia dice que es un león”.
Por otra parte, halagó al técnico de Boca, Carlos Bianchi: “Tenemos un entrenador que puso las cosas muy altas en nuestro club y solo cuando salga campeón dirá que las cosas las hizo bien. Es una maravilla ver a Bianchi con la misma tranquilidad desde el primer día que lo conocí. Da gusto tenerlo de entrenador. Tengo un cariño muy especial hacia él y lo disfruto. Bianchi a los hinchas nos acostumbró a ganar, ganar y ganar”. También recibió los elogios del diez el mediocampista Fernando Gago: “Con la llegada de Fernando tenemos más tranquilidad. Es un gran jugador y lo disfrutamos”.
Para ir cerrando, el ídolo xeneize se emocionó recordando sus partidos más conmemorativos: “El hincha recuerda el caño a Yepes, y fue algo que me salió ahí, no lo pensé antes. Tuve a grandes jugadores como compañeros, como Palermo que hizo 300 goles. Ellos me hacían las cosas más fáciles. Yo le daba muchos pases a Palermo, él al arco no le erraba. En la Copa Libertadores 2007 todos atacaban, era un equipo especial, lo disfruté mucho. Me acuerdo del gol contra Cúcuta por la neblina que había ese día. Me acuerdo también en el 2008 el partido contra River, que ganamos con gol de Viatri y quedamos a ocho de San Lorenzo. En ese campeonato yo metí cinco goles más y salimos campeones. El día de la final contra Cruz Azul vi a La Bombonera tan llena… La gente no podía entrar, se quedaba afuera, era una locura y fue muy lindo poder vivir eso desde adentro. En esa final sabíamos que la ganábamos por penales, teníamos un arquero distinto como lo es Oscar Córdoba. En los penales, el arquero nos decía que él atabaja uno o dos penales seguro, pero que nosotros nos ocupemos de convertir. ¿Cómo no íbamos a ganar?”. Emocionado, el diez de Boca volvió a referirse al partido del domingo y contó: “El partido de ayer fue muy especial. Tuve que pedirle a Utilero varias camisetas más porque varios jugadores de Quilmes me pedían para intercambiar”. Y confió desde la intimidad: “A mi hermano le gusta mucho el fútbol, y cada vez que termina el partido hablo mucho con él. Vemos el fútbol bastante parecido. Por ejemplo, él se enojó conmigo porque le di el pase a Escalante, y él me decía que la tenía que seguir yo y pegarle al arco. Sé que tomo decisiones equivocadas, pero si mis compañeros están en una mejor posición debo pasarles la pelota. Él se enoja porque yo disfruto más del pase para que el delantero haga el gol. Cristian es muy bostero, disfruta los triunfos más que yo”.
En el posible caso de que el próximo partido disputado en La Bombonera Boca deba vestir la alternativa rosada, al enfrentarse a Central, Román aseguró que le gustaría vestir la azul y oro en su 195º partido: “Yo no soy el que elige las camisetas, pero la camiseta de Boca es la que usamos ayer. No hay otra”.
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